miércoles, 11 de marzo de 2009

Execution Dock

Durante más de cuatro siglos en Londres, se ahorcaron a los Piratas en Execution Dock, en la ribera norte del Támesis. Hoy en día se encuentra cerca de la torre de Londres, actualmente hay un Pub que lleva el nombre de uno de los piratas que fue ejecutado por la horca, "El Capitán Kidd".

En el siglo XVIII el principal puerto de Londres estaba un poco más arriba, así que los barcos tenían que pasar cerca del Execution Dock, el patíbulo se montaba en la orilla, cerca de la línea de la marea baja. Una vez ahorcados, los cadáveres de los piratas quedaban lentamente sumergidos por las aguas arremolinadas de la marea entrante. Tenían la costumbre de dejar pasar tres mareas antes de descolgar los cuerpos,”dentro de los limites de las líneas de la marea”, para resaltar que habían cometido sus delitos en el seño de la jurisdicción del Almirantazgo. El almirante en jefe era el responsable del castigo de los delitos graves o crímenes cometidos tanto en alta mar como en las vías navegables hasta la línea de la marea baja. Por encima de esta, era competencia de los tribunales civiles.

El condenado debía de ser trasladado en procesión desde la cárcel de Marshalsea, cruzar el puente de Londres, pasar frente a la torre y llegar hasta Execution Dock. La procesión iba encabezada por el oficial de justica del Almirantazgo, que portaba el remo de plata que representaba la autoridad del Almirantazgo. El pirata tenía derecho a unas últimas palabras de arrepentimiento. El verdugo ayudaba al pirata a subir por la escalera, le colocaba la soga alrededor del cuello y, cuando el oficial de justicia daba la orden, lo arrojaba al vacio. La caída no siempre era suficiente para provocar la muerte en el acto, en este momento si había un pariente o amigo del pirata se le permitía que tirasen de sus piernas a fin de poner fin a su agonía. En la ejecución del Capitan Kidd la soga se rompió y tuvo que ser llevado de nuevo al patíbulo. Después de quedar sumergido por las mareas, el cadáver era bajado y enterrado en una fosa común o enviado a los médicos para su disección, también podía ser colgados de cadenas para que otros tomaran el ejemplo del fin de los piratas al entrar al puerto de Londres.


Tomado de Bajo Bandera Negra, la vida entre piratas de David Cordingly (Edhasa)

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